Bienvenidos al centésimo décimo tercer programa de EL TERCER PLANETA emitido el 19/10/2012 y conducido por Julio A. Guerrieri y Sergio O. Rubinetti ... y gracias por estar.
Durante la mayor parte de la historia de nuestra especie hemos querido saber si estamos solos ó no en este inmenso Universo. Siempre ha sido un tema que ha acaparado la atención y el estudio de nuestros máximos exponentes de la Ciencia el deseo de saber si tenemos “hermanos” entre las estrellas. Y claro; con esas ganas de explorar que corre dentro de nosotros nos abalanzamos con toda nuestra tecnología en la búsqueda de “otros” como nosotros. Para ello hemos estudiado una gran cantidad de astros parecidos al nuestro y hemos encontrado lugares muy prometedores para la aparición de la vida. Parece ser que las leyes del Universo ensamblan casi espontáneamente a las cadenas moleculares si las condiciones son propicias y a partir de allí puede comenzar a desarrollarse la vida. Los modelos indicaban que la mayoría de las estrellas sobre el plano galáctico eran las mejores candidatas. Hasta nos aventuramos a suponer que podían tener un aspecto parecido al nuestro si las exigencias de la evolución eran las mismas en toda la galaxia. Pero lo más difícil fue siempre saber la duración de una civilización alienígena porque nosotros éramos el único ejemplo. Podía ser que otros seres hayan desarrollado un sentido distinto al nuestro que está basado en la competencia y supervivencia del más apto, para canalizar un innato deseo autodestructivo capaz de terminar con toda nuestra civilización en poco tiempo.
Por ironía del destino buscamos en astros lejanos en lugar de empezar por los alrededores de casa. Buscábamos señales de seres inteligentes del otro lado de la galaxia sin pensar que podrían estar muy cerca. Sintonizábamos estrellas de la misma clase que la nuestra pero muy lejanas, sin pensar en las más cercanas. Por fin, no hace mucho tiempo, hemos captado una señal que los instrumentos determinaron que provenía de una estrella que, después de nuestro astro, es la más cercana a nuestro lugar de origen. Su estrella la vemos desde nuestros cielos transparentes. Nunca nos hubiéramos imaginado que estaban tan cerca. Y no solo eso: nuestros científicos han logrado descifrar uno de los extraños sistemas fonéticos que estos seres utilizan para su comunicación. Tanto que hasta hemos podido traducir con nuestros instrumentos su significado. Hemos descubierto un lugar muy parecido al nuestro en un sistema estelar frente a nosotros. Estos seres llaman a su cuerpo celeste que les dio origen: planeta Tierra.
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