"Manos a la obra"

Temas a tratar:

1. Estar preparado (5:02 )
2. Presta atención (14:08)

Desarrollo:

El contexto de todo lo que habla Jesús es: “Hay que estar preparado”.

Que bendición ser parte de todo lo que Dios está haciendo.

Él viene por una iglesia gloriosa (Efesios 5:27).
La iglesia debe estar preparada cuando Él venga por ella  (Apocalipsis 19:7).

Vemos las señales en el mundo, a más luz, más oscuridad. Estudiarlo nos ayuda a prepararnos.

1. Estar preparado

Leemos Mateo 24:36-51 (RVR1960)

Como en los días de Noe (v.37)

¿Qué pasó? El mundo no estaba preparado.

Hay que estar preparados siempre porque no sabemos lo que se viene.

Puede ser pandemia o guerra, pero si estamos preparados estaremos bien.

En la iglesia no hay tiempo de descansar (Amós 6:1 / Hebreos 2:1).

No hay tiempo de descansar, mantén tus manos a la obra.

Estar preparado es estar ágil.

Una estructura cimentada cerca al mar no se mueve, pero al subir la marea se estanca.

Un bote no es tan estable, pero cuando sube la marea también sube el bote.

Orden es bueno pero no al precio de no poder subir con la marea.

Cambio es importante, es constante y hay que saber leer los tiempos (1 Crónicas 12:32).

2. Presta atención

Cuando hablamos de que uno será dejado y otro llevado no es el arrebatamiento.

En aquel día los injustos serán juzgados, no los cristianos.
No es un castigo sobre los malos, simplemente no estaban preparados cuando vino el Señor.

Siempre hay que estar esperando su venida.

Señales hay en todo tiempo pero hay que estar preparados siempre.

¿Cuando él viene te encontrará trabajando?¿Estarás listo, despierto?

Mientras que el resto no se preocupaba por Dios, solo Noe prestaba atención a Dios.

Presta atención a Jesús.

La gracia que Dios nos da es mucho más poderosa de lo que podemos imaginar.

Si estamos en su gracia estamos bien.

Cuando preguntan: ¿Alguien puede perder su salvación?

Yo contesto: ¿Su gracia se agota?

Trabajar es permanecer en relación con Jesús y descansar en el Espíritu Santo.

No te preocupes por los altos y bajos diarios, mantente conectado.

Dios no es fiel porque yo sea fiel. Dios es fiel porque Él es fiel (2 Timoteo 2:13).

La sangre de Jesús es poderosa, suficiente para mi salvación.