La gracia y la misericordia de Dios precisamente tienen que ver con que Dios no nos trata con base en lo que merecemos, sino con base en su amor hacia nosotros. Sin embargo, la iglesia está llena de personas, que aunque son hijos, no disfrutan la vida abundante de los hijos porque aún tienen una mentalidad de esclavo. El Hijo-Esclavo piensa que el amor y la bendición de Dios son una remuneración por su servicio y obediencia.
Create your
podcast in
minutes
It is Free