No dejes que el enemigo te robe todo esas bellas Bendiciones que Dios te ha brindado. Él tratará de dañar tu corazón diciendo cosas como: «No eres un buen cristiano, eres un hipócrita, no vales nada, …», pero lo más importante es que mantengas siempre presente al valor que tienes, el valor que Dios te ha brindado al aceptarte como su hijo o hija.
Latido 47:12
Create your
podcast in
minutes
It is Free