Acusan a la Seguridad de Estado cubana de implantar pruebas falsas al preso político Misael Díaz Paseiro
Arianna López Roque, esposa del prisionero político Mitzael Díaz Paseiro denuncia a través de Radio Viva 24 que la policía política cuba intenta una nueva acción contra Díaz Paseiro.
Esta vez, según relata, usan a presos comunes para implicar a su esposo en acciones altamente sancionadas en las cárceles de Cuba, como el contrabando de armas mortales.
Los hechos ocurren en la prisión Guamajal de la provincia de Santa Clara.
Según la denunciante, un peligroso preso común, de nombre Fernando Cordero Montes, fue sorprendido escondiendo armas cortantes entre las pertenencias de Díaz Paseiro.
Si durante una de las frecuentes requisas carcelarias de detectan armas en las pertenencias de un recluso, la sanción inmediata puede incluir golpizas y aislamiento en celdas de máxima seguridad.
¿Qué es la “peligrosidad predelictiva”?
Se trata de uno de los legados del nacismo que con más apetencia implementó Fidel Castro en la Cuba revolucionaria.
Al igual que en la Alemania de 1937, en la actualidad los fiscales de la isla pueden castigar a los “sospechoso” con penas de cárcel antes de que, supuestamente, cometan un delito.
En ambos casos los “arrestos preventivos” no solo se aplican a delincuentes habituales sino también de personas que consideradas como “potenciales delincuentes”.
En la Alemania de Hitler se les conoció como “volksschädling” o “plaga común”, una categorización que incluía, entre otros, a repetidores de chistes y comentarios en contra de los nazis, a prostitutas, homosexuales, mendigos, sicópatas y a quienes que se negaran a aceptar en dos ocasiones los empleos que les ofrecía el estado.
En la Cuba revolucionaria la ominosa lista incluye también a disidentes y opositores.
La “peligrosidad social” es, hoy por hoy el recurso legal represivo que con más frecuencia se aplica a quienes disienten del régimen comunista.
Create your
podcast in
minutes
It is Free