El Servicio Nacional de Atención a Personas Privadas de Libertad aseguraba que la situación estaba controlada en las cárceles donde varios amotinamientos dejaron 79 muertos, pero incluso hasta la noche del miércoles se registraron nuevos ataques en el Centro Regional de Guayaquil.
Familiares de fallecidos y exdirectivos de la institución hablaban de la crueldad de los ataques, de la formación de nuevos liderazgos en las bandas, de una supuesta pérdida de hegemonía de la banda Los Choneros, pero sobre todo una presunta pérdida de autoridad por parte de la entidad que administra las cárceles.
Create your
podcast in
minutes
It is Free